Los tuiteros de la Ufro: de la amistad virtual a la identidad digital

Por: Juan Carlos Poblete

De camino a clases, antes de entrar a la prueba o después de salir de la sala a un pequeño descanso, el uso de redes sociales es un hábito común en los estudiantes de la Universidad de La Frontera. No es extraño ver jóvenes sentados con la mirada fija en sus celulares, avanzando hacia abajo en la pantalla, buscando frenéticamente algo curioso, interesante o divertido para mostrar a quienes están al lado.

twitter-los-hace-y-ellos-se-juntanEn la era digital, las redes sociales son cada vez más utilizadas, siendo Twitter la red social de mayor crecimiento a lo largo de los últimos años en nuestro país, llegando a los casi cinco millones de usuarios. Esto coloca a Chile como el séptimo “país más tuitero” dentro de América Latina, y abre la interrogante sobre el por qué del “boom” de Twitter en Chile. “Boom” en el que los estudiantes de la Ufro no se han quedado atrás y se han registrado en la red social a tal nivel, para dar rienda suelta a sus pensamientos, inquietudes y demandas. Hoy, esto coloca al uso de Twitter como un hábito cotidiano incluso útil y necesario para el diario vivir de los universitarios, que ven en ella una herramienta de información y libre expresión.

Según un estudio del Foro Económico Mundial, el 66% de la población de nuestro país tiene acceso a Internet, y la mayoría de los usuarios tiene al menos una cuenta en alguna red social. Y aunque Chile está en el puesto 34 en el ranking de uso de estas plataformas, las cifras de acceso a Internet, la explosión del uso de Internet móvil y el crecimiento del mercado de smartphones, ha influido a que en la actualidad, Twitter tenga más de 560 millones de usuarios a nivel mundial, estando, eso sí, muy lejano a los más de mil 600 millones que tiene Facebook, la red social más utilizada en el mundo.

Pero pese a que la cantidad de usuarios de Facebook sigue aumentando, los estudiantes de la Ufro parecen haber encontrado en Twitter un lugar más “pacífico” o “privado” para plasmar lo que sienten en instantes del día. Instantes que son cristalizados en textos de no más de 140 caracteres que pueden ser leídos y compartidos por cientos de personas a la vez.

Claudia Antipichún estudia Ingeniería Civil en Biotecnología y tiene más de mil 400 seguidores. Según ella, utiliza Twitter “para informarme porque es instantáneo y mucho más rápido que los medios como la tele o el diario”. Para ella, que Twitter tenga menos usuarios que Facebook es una ventaja, ya que “tiene más privacidad en ese sentido, o al menos eso parece. Así comento lo que pasa en Chile, en Temuco o en Villarrica, mi ciudad. Así como también comento series o novelas cuando puedo”, detalla Claudia.

DE TWITTERAS A AMIGAS

gente tuiteandoA Claudia, la costumbre de “comentar televisión” a través de Twitter le trajo una nueva amiga. Yessica Torres, estudiante de Derecho, recuerda que seguía a Claudia y, como veían la misma teleserie comenzaron a enviarse tuits –la unidad básica textual de 140 caracteres– sobre la teleserie en común. “Después de eso empezamos a hablar y nos juntamos en la Ufro a tomar granizado”, relata Yessica, que tiene más de 4 mil 600 seguidores en su cuenta.

El momento en el que la amistad digital pasó a personal fue mágico para las dos. Sin embargo, a veces el efecto es contrario. “Muchas veces hay gente que se da color por Twitter y en realidad son unos muertos en la vida real. Por eso trato de no seguir gente de mi carrera, porque acá puedo escribir y desahogarme de lo mal que me caen las actitudes de mis compañeros de U y nadie me lee, cosa que no podría hacer en Facebook porque allá sale mi nombre, y aquí solo ocupo un nombre usuario que no es mi nombre completo”, enfatiza Yessica.

EL TUIT MÁS RECORDADO: EL AUTO EN LA ESCALERA

Francisco López estudia Periodismo, y aunque solo tiene poco más de 200 seguidores, ha sido testigo de algunos hitos de la relación entre la Ufro y Twitter. “Las cosas que se hacen famosas en Twitter son pequeños golpes periodísticos. Puede ser que la Ufro tenga muchos avances científicos o académicos, pero la verdad es que lo que se difunde masivamente en Twitter son las situaciones que rompen con la normalidad”, reflexiona. “Por esto mismo, los tuits que más me acuerdo que se difundieron muy rápido fueron los de los autos que se cayeron en los escalones que quedan afuera del edificio de la Facultad de Humanidades”, recuerda López. Uno de los usuarios de Twitter que subió una foto de ese hecho, ocurrido un 25 de marzo del año 2014, fue Carlos Agurto, estudiante de Periodismo. “No era la primera vez que pasaba algo así, la diferencia fue que tome mi iPad, que justo en ese momento lo tenía en la mano, y le tome una foto, luego lo subí a Twitter. Se me ocurrió subirla porque creí que era una situación curiosa y graciosa a la vez”, recuerda. La foto de Carlos se difundió de tal manera que tuvo más de 100 republicaciones, 11 mil visitas en la página web de Radio Bío Bío, y apareció en la edición del día siguiente en Las Últimas Noticias y El Austral de Temuco.

Foto: Carlos Agurto | Radio BioBio

Foto: Carlos Agurto | Radio BioBio

Y aunque el hecho por el que la Ufro fue momentáneamente “famosa” fue algo bastante curioso o insólito, la fama de Twitter es tan efímera y pasajera como cada pensamiento, idea, palabra o frase posteada en la red social. Eso sí, “algunos lo usan como herramienta para opinar sobre lo que ven y/o les pasa, denuncian situaciones que a juicio de ellos son irregulares, curiosas, divertidas, insólitas, pero también hay mucho de salvavidas en Twitter, porque cuando sucede una tragedia o algo que les afecte o no y se puede usar para difundir y ayudar”, opina Carlos Agurto. Es, precisamente, ese doble beneficio de “útil y divertido” lo que ha convertido a Twitter como una red social cada vez más popular dentro de los estudiantes de la Ufro, donde las notificaciones a los teléfonos pueden terminar sacando una sonrisa a quien escribe y a quienes leen lo escrito.

Comentarios