Por: Rocío Cuminao
Un género de comedia pero con un tinte distinto, difícil para quienes lo practican, un desafío nuevo a cada segundo. Es lo que se ha instalado en nuestro país hasta en programas de televisión. Se trata de la improvisación teatral. Una disciplina donde los actores llevan a cabo una acción de forma espontánea y sin preparación alguna.
La improvisación teatral llega a nuestro país en los años 2000, y se populariza en el 2010, con el programa “Los Improvisadores” transmitido por el canal ViaX, donde tuvo un éxito masivo, debido a que el público también participa aportando temáticas o simples situaciones a partir de las cuales los actores comienzan su actuación improvisada.
En La Araucanía también tenemos nuestra propia compañía de improvisación teatral. IMPRO Temuco nace el año 2015 de la mano de un taller de teatro gratuito. Dirigido por la actriz chilena Alejandra Ibáñez, quien junto a sus alumnos y tras realizar la presentación final del taller, decidió formar la compañía y ofrecer sus presentaciones a diversos escenarios.
Y les ha ido tan bien que el año pasado estuvo lleno de éxitos. Ensayando dos veces a la semana, con distintos juegos para entrenar la espontaneidad y creatividad, sorprendieron al público regional en una serie de diversas presentaciones en distintos formatos, donde siempre los protagonistas son los asistentes.
Matías Gajardo, estudiante de Ingeniería de la Universidad de La Frontera, es integrante de la compañía IMPRO Temuco y nos cuenta que “la improvisación me ha ayudado mucho personalmente, ya que antes de empezar con esto existían en mí muchos miedos y prejuicios que evitaban que pudiera comunicarme de una manera que no fuera forzada. Ahora he podido ver las interacciones sociales de una forma más sana y sin superficialidad”.
Matías ha tenido una variada carrera dentro de la improvisación, ya que además de formar parte activamente de la compañía regional IMPRO Temuco, estuvo en Santiago asistiendo a un taller impartido por miembros de “Los Improvisadores”. “Ahí participé de un taller intensivo con el objetivo de aprender de los grandes exponentes de la improvisación en América Latina. Tras esto, me invitaron a participar del concurso “Mister Impro” donde el público elige al mejor improvisador. Dentro de los 14 competidores, yo fui escogido el Mister Impro 2016”.
Finalmente, Matías indica que “para quienes quieran comenzar a improvisar, mi consejo es que partan por eliminar la superficialidad, y por sobre todo estén dispuestos a fortalecer la creatividad que todos tuvimos en la niñez”.
Así que ya saben, la improvisación, un género relativamente nuevo en el teatro, y que permite utilizar la creatividad para generar historias, escenarios y conflictos con el objetivo de además, hacer reír al público. Un buen ejercicio para la aceptación de uno mismo y perder el miedo a equivocarse, con un trabajo en equipo constante, que lo ayudará a liberar el estrés, entrenar su creatividad y desarrollar el humor, algo con el que hoy en día, no todos contamos.