Incremento de VIH en la región: ¿Desmotivación entre la población o falta de gestión?

Por Natalia Almonacid y Constanza Ulloa

Aproximadamente hace dos años se inició una alerta de incremento de casos de VIH a nivel nacional, en el caso de la Región de La  Araucanía. Sólo el año pasado se notificaron 131 nuevos casos y siete de éstos correspondieron a jóvenes menores de 20 años, una cantidad no menor que, revela que no estamos ajenos a contraer esta infección. Sin embargo, ¿El incremento es debido a que no nos responsabilizamos de la enfermedad o por falta de estrategias por parte del Gobierno?

Si observamos, desde 1984 a 2017, se han observado más de 65 mil casos y el aumento en la tasa nacional más notorio fue el año 2011. Según el informe de situación epidemiológica VIH/Sida de nuestra región, el primer caso se diagnosticó en 1989 y hasta el año pasado, han sido diagnosticados mil ciento cuarenta y seis casos a nivel regional. En el año 2016 se registró un aumento significativo en casos de Sida, ya que es casi el doble que años anteriores, con un total de setenta y cuatro casos.

La encargada regional del programa de VIH de la Seremi de Salud, María José Carrasco señala que: “Hubo incremento de la enfermedad en lo nacional, pero a nivel regional lo que se vivió el año pasado es muy similar a lo que se tiene actualmente, y se debe principalmente porque hubo un aumento en la pesquisa, lo que significa que los usuarios tienen mayor acceso al examen y mayor conocimiento”. Y reitera que no fue tanto el aumento del 2016 al 2017, ya que son treinta y uno casos evidenciados en el boletín epidemiológico que se hace en forma anual al nivel de la Seremi y sólo en el año 2015 hubo un cambio más rotundo que en alza a nivel regional.

Características de los pacientes

Según el médico infectólogo del Hospital Regional de Temuco, Francisco Cerda, son pacientes entre 15 y 39 años que no frecuentan los servicios de salud, de manera que, cuando se identifican casos es debido a que la persona por voluntad propia decidió acudir a un servicio asistencial y realizarse el examen.

El especialista también menciona que: ‘‘Eso significa que sólo ellos están más concientizados de la enfermedad, ya que no es que sea exclusivamente de ellos porque también hay pacientes heterosexuales”.

Por ello, agrega que: ‘‘Las personas con orientación homosexual llegan con un diagnóstico más temprano, a diferencia de personas heterosexuales que existe una cantidad no menor que se diagnostican a una etapa CD4 bajo doscientos (refiriéndose a etapa Sida)’’.

Causas del incremento

Dentro de las causas que detienen una detección a tiempo es la estigmatización que tiene esta enfermedad, hay personas que al día de hoy aún creen que esto sólo se atribuye a homosexuales, lo cual es completamente erróneo, puesto que todos son vulnerables.

Otra causa es que para personas jóvenes que no conozcan el sistema de salud, puede parecerles engorroso el trámite para realizarse el examen Elisa, de manera que, lo dejan en segundo plano cuando existe mucha información sobre los distintos tipos de prevención.

Una mujer que porta la enfermedad hace cuatro años y no quiso revelar su identidad por confidencialidad, sostiene que conoce a jóvenes que han sido recién diagnosticados y que ellos no estuvieron preocupados al momento de contagiarse. En ese sentido, afirma que: ‘‘Hace un tiempo se perdió el susto a la enfermedad puesto que existe mucha indolencia en la población’’.

Asimismo, señala que, desde su experiencia, el VIH no se siente y no se ve, por tanto, una persona sexualmente activa debe estar consciente de que tiene que realizar el examen Elisa porque la enfermedad no está lejos: ‘‘…Da lo mismo de dónde provengas, la infección puede ser de cualquier persona sexualmente activa que no utiliza el preservativo periódicamente’’.

Por otro lado, el estudiante de Administración Pública y que se ha realizado el examen Elisa, Jorge Beltrán, señala como una razón del incremento el conservadurismo: ‘‘Muchos de estos temas aún son tabú para gran parte de la región, las familias no conversan sobre ello y hay falta de información en la población general, ya que mucha gente sólo sabe del Sida e ignoran otras cosas’’.,

Las estrategias

Si bien observamos que el grupo etario en donde se presentan más casos de VIH es en el rango de 20 a 29 años, con una suma total de setenta y seis casos, en los adolescentes menores de 20 años se registran siete casos, misma cifra que el 2016, según el informe de situación epidemiológica VIH/Sida de la Región de La Araucanía.

A consecuencia del alza juvenil a nivel regional, la representante de Mesa VIH por parte de la Secretaría Regional Ministerial de Educación (Secreduc), Paulina Olguín comenta: “Nos hemos hecho presentes activamente para fomentar la prevención, la no discriminación y la entrega de información oportuna a los y las jóvenes de La Araucanía”.

Cabe destacar que, en la actualidad, la actividad sexual se inicia desde la adolescencia incluso hay casos en donde inician en la pubertad, por tanto, los establecimientos educacionales cuentan con profesionales como psicólogos, orientadores, entre otros, que se encargan plantear estos temas a los estudiantes: ‘‘La orientación educativa y vocacional es un pilar fundamental para los jóvenes estudiantes durante las diferentes etapas de su formación, basado en estrategias que faciliten vincularse con su medio social y cultural, así como también con la educación sexual’’ señala Viviana Muñoz, orientadora del Liceo Camilo Henríquez.

Para ello existe el Plan de Afectividad, Sexualidad y Género que debe incluir información sobre cómo prevenir la transmisión del VIH y otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS), información sobre la prevención del embarazo adolescente, entre otras temáticas que también son abordadas. A los liceos o colegios también se les brinda material de apoyo por parte de la Estrategia Nacional Intersectorial en Sexualidad, Afectividad y Género (ESAG) para vincular a los estudiantes con el tema.

Al consultar con más de cincuenta alumnos de establecimientos tanto municipales, particulares subvencionados y particulares se descubre que los planes que se imparten no son aplicados en todos los establecimientos, es decir, hasta el día de hoy hay alumnos que egresaron de cuarto medio y jamás recibieron charlas de educación sexual.

Un estudiante egresado del Instituto Superior de Comercio afirmó que, en sus cuatro años dentro de este liceo, sólo una vez llegaron a realizar una campaña de prevención que se limitó en entregar preservativos masculinos a la comunidad estudiantil: ‘‘Los preservativos lo usaron para jugar, esto quiere decir que es un indicio que falta una educación sexual al interior de establecimientos educacionales’’.

En relación a las estrategias implementadas a nivel universitario el coordinador del Servicio de Salud de la Universidad de La Frontera (Ufro), Carlos Belmar, las campañas preventivas de VIH se hacen en contexto los programas de prevención y promoción en salud, establecido por el Ministerio de Salud, con distintas temáticas difundidas por las universidades. Menciona también que: “Como universidad se cumplen con las labores de promoción, pero no nos hacemos cargo ni recogemos todas las demandas”. Por lo mismo, enfatiza que la universidad es un pequeño país donde el servicio de salud se encarga de ser un mediador, entregar la información y diagnóstico, pero cada alumno elige según sus preferencias y comodidades donde realizarse el tratamiento.                                                   

 Situación actual

En mayo de este año el Gobierno presentó un plan nacional de VIH/Sida e ITS que contará buscar reducir el estigma con respecto a este tema, entregar mejores herramientas de prevención y análisis del actual sistema de atención que tiene que ver con la implementación e inversión de varias herramientas. ¿Será la solución ante el incremento? ¿Podrá romper barreras de la incidencia?

Dentro de las mejoras, se pretende incluir el test rápido que eliminará los trámites engorrosos e incluso se está trabajando para implementar la entrega de preservativos femeninos, para así entregar un control tanto para ellos como para ellas.

En vista a todo lo mencionado anteriormente se vislumbra que ambas partes cumplen un rol fundamental para que los proyectos y planes realmente prosperen y arrojen resultados positivos. Por lo que la persona debe ser consciente de la actividad sexual que tiene, evaluar métodos de prevención y romper el estigma al realizarse el examen Elisa porque el VIH lo puede contraer cualquier persona.

Y por otro lado, si bien existen políticas preventivas (como la Mesa VIH o mesa de debate por universidades y altos cargos), éstas a veces no llegan a todos los establecimientos o llegan pero no de la forma adecuada, por lo que sigue persistiendo la falta de difusión, en relación a la concientización, al prejuicio, la diferencia entre VIH y Sida, las formas de contagio, entre otros:  ‘‘Los establecimientos siguen líneas de inclusión y no discriminación, pero aún falta más concientización en el tema VIH y Educación Sexual en general. No sólo desde el punto de vista clínico, sino una educación sexual integral que incluya la perspectiva de género y que también tome en consideración los aspectos afectivos de la sexualidad’’ señala la representante de mesa VIH por Secreduc, Paulina Olguín.

Es por ello que se hace necesario que las personas se realicen el examen, para aumentar la pesquisa y en caso de tener VIH ser detectado a tiempo para entrar en tratamiento. El coordinador del Servicio de Salud Ufro, Carlos Belmar, señala que: “Para esto hay todo un sistema público, existe un fono VIH y el Hospital Regional tiene abierta las veinticuatro horas la unidad de toma de muestras para que el estudiante se acerque y se realice el examen”. Las políticas públicas jamás serán suficientes si no se tiene una responsabilidad entre individuos.

Comentarios